Había dudas sobre la celebración de uno de los festejos populares más tradicionales y espectaculares de cuantos se celebran en Guadalajara. El caudal del río Tajo a su paso por Trillo había aumentado mucho debido a las tormentas de las últimas semanas. Sin embargo, la afición de los trillanos pudo más que la fuerza de la naturaleza y el evento se celebró como estaba previsto. Un millar de personas más que el año pasado se acercaron al municipio alcarreño batiendo un nuevo récord de asistencia con 7.000 aficionados en las riberas del Tajo. Se soltaron tres vacas de casta navarra con el hierro de Santos Zapatería adquiridas por la peña taurina Vacas por el Tajo y dos de Adolfo Martín compradas por el Ayuntamiento local. En el encierro matinal con novillos de Andrea Ochaíta hubo tres volteados sin consecuencias graves.
Fuente: Nueva Alcarria
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