La mañana del martes de Carnaval comenzó con un toro del Aguardiente, sin aguardiente ni perronillas como es lo habitual en la plaza Mayor, de donde salió el astado colorao, con buena presencia de Pío Tabernero de Vilvís. No duró mucho en la plaza inicialmente, bajó hasta el Registro pero en menos de diez minutos había vuelto a subir, repitiendo la maniobra en dos ocasiones más, aunque sobre todo pasó la mayor parte del tiempo en la plaza Mayor.
A las once salió el encierro, siete toros de la Plata que subieron sin problemas por la avenida Conde Foxá. Cinco pasaron con rapidez y llegaron a la plaza, los otros dos se quedaron en diversos puntos del recorrido y prolongaron el encierro durante más de una hora. En la capea, destacable la acción de los maletillas y del grupo de recortadores con procedencia diversa que deleitaron a los presentes con su buen hacer en el arte de acercarse a los toros pero no dejarse ni tan siquiera rozar por los cuernos, ni aún teniéndolos a pocos centímetros. Desencierro largo que finalizó más allá de las dos, encerrando parte de los toros en los toriles de la plaza.
Tras la novillada, vino la capea, donde volvieron a repetirse escenas inolvidables como las que se ofrecieron en la mañana. El último desencierro del Carnaval 2011 salió a las ocho de la tarde y volvió a repetirse el desenlace del mediodía, se cerró en el Registro y los toros fueron encerrados en la plaza.
Informa: Red Ciudad Rodrigo
El día fue tranquilo y se desarrolló sin incidentes importantes. En el Carnaval 2011, ha habido un balance de seis heridos por asta de toro. El mas grave, el joven de Jaen que fue corneado el lunes por la mañana y que ayer se mantenía estable ingresado en la UCI del hospital Universitario de Salamanca
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