Llegó el 7 de agosto y en la localidad valenciana de El Puig, se celebró el primer día de toros en honor a Sant Roc.
Con cerca de 45 minutos de retraso sobre el horario establecido, y con una gran afluencia de aficionados, se dio suelta al primer toro de la tarde, perteneciente a la ganadería de Fuente Ymbro, en teoría el toro estrella del cartel y del que finalmente no hubo nada que destacar, solo su gran presentación. En segundo lugar, fue el turno del toro de Sánchez Ybargüen, este animal hizo una buena salida acudiendo a todos los cites, lástima que pronto se apagase.
A continuación saltó a la plaza el astado perteneciente a la ganadería de Los Azores, marcado con el antiguo hierro de Barral. Este toro dio un juego extraordinario tanto por la tarde como por la noche, un toro que fue a más durante su lidia, haciendo disfrutar a los aficionados, juntando un cúmulo de virtudes, entre las que destacaron la bravura y la nobleza, y siempre dando la cara, fue uno de esos pocos toros que mueren embistiendo. Un toro que será recordado durante muchos años.
Para cerrar la tarde, saltó a la arena otro astado del hierro de Fuente Ymbro, teniendo un comportamiento manso, sin ninguna fijeza.
Para cerrar la tarde, saltó a la arena otro astado del hierro de Fuente Ymbro, teniendo un comportamiento manso, sin ninguna fijeza.
Crónica: José Alonso
Foto: Bous al Carrer
Foto: Bous al Carrer
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